Considerado como una de las postales de Brasil, Rio de Janeiro, con sus bellas playas y atractivos naturales que la volvieron reconocida en todo el mundo. Aquí están las referencias conocidas en todo el mundo como Maracaná, samba y Garota de Ipanema. Rio fue la segunda capital brasileña y residencia de la corona portuguesa, que se mudó a Rio cuando Portugal fue invadido por Napoleón, en el siglo 19. Rio es una ciudad donde las diferencias viven en armonía. En Rio, gran parte de la vida social ocurre en las playas, lugar donde habitantes, turistas y clases sociales se mezclan. A los cariocas les gusta caminar, leer, jugar con pelota en la playa, muchas veces mezclando varias modalidades. Paseo en bicicletas, caminatas y carreras a la orilla del mar y almuerzos en pequeños y encantadores restaurantes son el cotidiano del carioca, que recibe turistas con simpatía y los incluye en la rutina saludable de la ciudad.
Tren del Corcovado
Conocer un punto de vista diferente del que muestran las principales postales brasileñas es una experiencia inigualable. Con el tren del Corcovado es posible atravesar la reserva del Bosque Atlántico perteneciente al Parque Nacional de Tijuca y llegar a los pies del Cristo Redentor, una de las siete maravillas del mundo moderno, donde se obtiene una vista privilegiada de la Ciudad Maravillosa.
Bondinho del Pan de Azúcar
El Bondinho de Pan de Azúcar es un teleférico ubicado en la ciudad de Rio de Janeiro, con vista a la Bahía de Guanabara. Se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas de la ciudad y recibe, en promedio, 2.500 personas diarias. Existen dos rutas: Praia Vermelha / Morro da Urca y Morro da Urca/ Pan de Azúcar, las cuales llevan cerca de tres minutos de travesía.