Ostenta el título de primer bien contemporáneo en convertirse en Patrimonio Cultural de la Humanidad, Brasilia destaca por su arquitectura moderna, y creatividad en la cocina regional, que extrae lo mejor de los condimentos nacionales e internacionales. Su construcción que concluyó en 1960, planificada para ser la nueva capital del país, atrajo personas de todo Brasil. Lo más destacado de la ciudad son las obras del arquitecto Oscar Niemeyer, entre ellas, la Praça dos Três Poderes y los Palacios de Planalto y Alvorada.
Pirenópolis, Goiás
Pirenópolis oculta los secretos de una ciudad que es historia pura. La localidad fue un importante centro urbano en los siglos 18 y 19, en el auge de la explotación del oro y en consecuencia del comercio y agricultura que abastecían a la actividad minera. Fue redescubierta en 1970, con la venida de la capital federal al Planalto Central. Se destaca por el conjunto arquitectónico de su centro histórico, reconocido como patrimonio nacional en 1989. Es también importante la celebración de la Festa do Divino, que reúne tradiciones como las Cavalhadas y de los Mascarados. A sus alrededores la ciudad cuenta con más de 20 cascadas.
Parque Nacional Chapada dos Veadeiros, Goiás
El Parque Nacional Chapada dos Veadeiros invita a los turistas a explorar sus 65.514 hectáreas por medio de antiguas rutas usadas por buscadores de piedras preciosas y metales. Senderos revelan formaciones vegetales únicas, centenas de nacientes y cursos de agua, rocas con más de mil millones de años, además de paisajes de rara belleza. Caminatas de observación de flora y fauna son las principales actividades realizadas en el parque, que fue declarado en 2001 patrimonio mundial natural por la Unesco.
